miércoles, 13 de julio de 2016

La guerra interminable (Joe Haldeman)



Ante la ausencia de nuevas propuestas de ciencia ficción hard, al menos traducidas al español, estoy optando por releer algunas de las novelas que mas me gustaron en su momento.

La guerra interminable fué una de las primera que leí, y probablemente la primera de CF de autores distintos a los dos clásicos, Asimov  y Clark. Por esas fechas estaba iniciando la secundaria y mis conocimientos de física eran limitados, pero aún así no tuve ningún problema en seguir la parte hard de la novela. 

 El argumento es relativamente sencillo. Los humanos han aprendido a realizar viajes interestelares, usando naves que viajan a velocidades sublumínicas, en perfecto acuerdo con la relatividad especial. Aparte de éso han encontrado algo llamado "colapsores" que permite viajar entre las estrellas. Un colapsor es descrito cómo algo similar a una estrella enana, o un planeta, pero muy pesado, rodeado de otros planetas. Durante uno de los viajes a uno de los colapsores una nave humana desaparece y se detecta que en las proximidades hay una nave alienígena, denominados taurinos, con lo cuál se asume que se ha producido un ataque y se está en periodo de guerra.

La novela comienza presentándonos al protagonista, un físico con estudios de doctorado en soldaduras en vacío. Junto a otros jóvenes, tomados entre los mas listos, sanos fisica y psicológicamente de la humanidad, ha sido reclutado para una fuerza militar que se enfrente a los taurinos. La primera parte de la novela se centra en el entrenamiento de este grupo en un planeta helado, a temperaturas cercanas al cero absoluto, usando trajes especiales, en plan exoesqueleto, que aumentan la fuerza y van profusamente armadas. La parte de física de bajas temperaturas está muy bien tratada. En su momento pude entender la idea general, pero al releerlo he visto que en un momento dado menciona los superfluidos. A esa edad no había oído nada de superfluidos, no lo haría hasta cuarto o quinto de carrera, y estudiando el tema por mi cuenta ya que no estaba incluido en temario. Realmente es algo que aparece mencionado cómo curiosidad puntual, no juega ningún papel importante y la propiedad clave del superfluido que usa Haldeman en la novela la explica perfectamente en una línea, pero, a posteriori, sabiéndo lo que es, le da una robustez mayor a la novela.

 Otro punto interesante de la novela es que el ejército es mixto, y que las relaciones sexuales entre los componentes del batallón son frecuentes y bastante libres. Eso comparado con autores mas recatados cómo Asimov y Clark resulta refrescante. Pero también es muy importante en la novela a un nivel mucho mas fundamental, que pronto explicaré.

Tras el entrenamiento, en el que hay unas cuantas muertes de los cadetes descritas de manera bastante contundente, al fin se dirigen a un planeta dónde hay sospechas de actividad taurina, y entran en combate dentro del planeta, tras masacrar a unos cuantos indivíduos de otra especie sin provocación previa, lo mismo que sucede luego con los taurinos. En ese combate aparece algo que es bastante común en esa época, los indicios de telepatía. En ese momento había unos estudios experimentales hechos por investigadores bien considerados, que apuntaban que alguna gente podía acertar imágenes que ellos no veían, pero sí otras personas, con una significación estadística superior a la mera suerte. Eso se interpretó cómo que alguna gente podía leer la mente de los que veían las imágenes y, durante un breve tiempo, dió un aire de credibilidad científica a la telepatía. Aparece en varias novelas hard de la época, incluyendo las de Asimov, aunque posteriormente se vió que había errores de sesgo en esos experimentos y la idea de la telepatía viable desapareció de el mundo científico.


 Tras ese combate Mandella y sus compañeros vuelven a la tierra, y ahí entra uno de los grandes protagonistas de la novela, las transformaciones de Lorentz, en particular la contracción relativista del tiempo. Para mí éso no era nada nuevo pues ya las había oído nombrar varias veces en libros magufos de Erich Von Deniken y similares sobre visitas de extraterrestres en tiempos históricos del Egipto clásico y otras épocas. De hecho había oído hablar tanto de la relatividad especial que había decidido intentar estudiarla formalmente, con éxito. Realmente el álgebra de la relatividad especial, en su presentación mas sencilla, cómo la hizo Einstein inicialmente, antes de la reinterpretación de Minkowsky, es matemáticamente sencilla y usa sólo álgebra muy básica, y su única dificultad es entender los conceptos, y, la verdad, éstos tampoco son terriblemente complicados. No recuerdo sí ya había estudiado los detalles de la relatividad especial antes de esta novela, o sí su lectura fué la que me decidió definitivamente a estudiarla, pero, en cualquier caso, no tuve ningún problema en entender el concepto de la contracción relativista del tiempo. Si yo, con esa edad (menos de 16 años, no recuerdo exactamente cuál) pude entender esa física sin problemas no veo cómo gente adulta, y con acceso a Internet para consultar cualquier cosa, se asusta de que en una novela haya ciencia sofisticada.

 Volvamos a la novela. Debido a esa contracción de Lorentz cuando llegan a la tierra los cadetes han envejecido unos dos años, pero en la tierra han pasado décadas. En ése tiempo ha habido bastantes cambios tecnológicos y sociales, y Haldeman describe bastantes de ellos en rápidos apuntes. En pocas líneas aporta mas ideas sobre innovaciones sociales que muchas novelas famosas, tipo 1984 o rebelión en la granja, de manera mucho menos dogmática. Una de las cosas que comenta, y que mas me ha llamado la atención, es una idea de los 70: "el miedo del futuro", que se describe cómo el hecho de que el avance de la ciencia, y los que conlleva éso para la sociedad. sea tan rápidos que la mayoría de los humanos sea incapaz de asimilarlos. Con terminología moderna éso es "la singularidad tecnológica", y es sorprendente ver que algo que pasa cómo un concepto reciente ya lleva mucho tiempo presente. Un aspecto curioso de esos descontroles en el tiempo es que, debido al avance de la ciencia, los conocimientos de física de Mandella están muy desfasados. Ahí hay un aspecto muy curioso. Aunque parece muy razonable la realidad es que un graduado en físicas hoy día, en Europa, y con el plan Bolonia, termina sabiendo menos que un licenciado en físicas de hace unos veinte años (de hecho las licenciaturas han sido actualmente equiparadas a un master). En todo este tiempo la física básica apenas ha cambiado, exceptuando meter menos matemáticas y mas informática -sobre todo programación- en los planes de estudio, lo cuál no es en absoluto un avance Siempre se puede aprender esa informática en cursos extracurriculares, y sería mas productivo seguir viendo esa matemática. En cualquier caso, y en referencia a la novela, un licenciado en físicas de hace veinte, o cuarenta años, estaría bastante desactualizado respecto a la investigación puntera, pero para un trabajo convencional no tendría el mas mínimo problema.

 En cualquier caso ahí Haldeman aprovecha para sacar otros dos aspectos interesantes de la novela. Da por hecho que el ejército manipula a sus militares (el antimilitarismo es una constante a lo largo del libro) y usa trampas financieras y de presión para que los militares, que en teoría son ricos debido al rédito de sus sueldos de décadas acumuladas, pronto se arruinen y deban inevitablemente reengancharse en el ejército. Osea, ingeniería financiera para arruinar al ciudadano de a pie, y manipulación sin miramientos ¡muy actual, y una de las claves de la crisis económica!. También está el hecho de que el sistema de atención sanitaria y de pensiones deje de cubrir a la gente poco adinerada cuando se hace mayor. Vamos, que Haldeman había previsto perfectamente al FMI y a los neoliberales.

 Otro aspecto, que en esa primera visita aún no es tan patente, es que, para moderar el crecimiento de la población, la homosexualidad se va convirtiendo en la norma y no en una excepción. Según van viajando, y volviendo cada vez a épocas mas alejadas en el futuro, éso será un hecho mas marcado y todos los supervivientes de esa época serán reliquias sociales y sexuales (pese a ser jóvenes). Leer esa novela prepara a la gente para hacerse la idea de que no puede dar por sentado nada sobre las costumbres que se considerarán apropiadas en el futuro. En la buena CF éso es una de las claves, pero  en autores mas conservadores en lo social cómo Asimov y Clark, o gente de CF tipo space ópera no está tan presente y los humanos del futuro son socialmente demasiado similares a los de la época en que se escribe, y sólo cambia la parafernalia.

 Otro aspecto que quiero reseñar es el papel de los ordenadores en las guerras entre naves. Cuando hay que tomar decisiones de maniobras complejas a tanta velocidad los reflejos humanos son demasiado lentos y la vida depende de decisiones que deben tomar los ordenadores en fracciones de tiempo tan pequeñas que la gente ni se daría cuenta de que ha muerto caso de perder. Por un lado es muy real (hace unos días ví la noticia de que ya hay sistemas de inteligencia artificial que pilotan aviones de combate de tal forma que pueden derrotar a cualquier piloto humano, por no mencionar la inminente llegada de los coches que se conducen solos, por ahora con algunas deficiencias). Por otro lado me gusta que ponga en su sitio el orgullo de los humanos, en especial los militares, al verse rebajados ante la tecnología. Éso no significa que la inteligencia creativa no juegue un papel. Hay una escena muy interesante en la que juega con maneras de sobrevivir en alta gravedad/aceleración, estando gravemente herido.

 Otra parte muy creativa, que es una de las que siempre había recordado, es la creación del "campo de éxtasis", o algo similar. La idea es que hay un campo, en el que se puede vivir sólo sí se viste un traje especial, en el que cualquier cosa que se mueva a mas de 50 kilómetros hora es destruida inmediatamente. Éso hace que, en medido de una tecnología futurista, las batallas de infantería deban dirimirse con arcos, lanzas y espadas, al estilo de la edad antigua, lo cuál es una paradoja muy interesante.

Dejo aquí la descripción de la novela, y cómo se resuelve al final el conflicto de los humanos con los taurinos. Cómo queda claro de todo los escrito la novela me parece una absoluta obra maestra y en la relectura me ha parecido muchísimo mas interesante de lo que me pareció en su momento, y éso que ya desde su primera lectura había pasado a ser de mis favoritas. Pero éso, que al ver la gran cantidad de cosas que ha predicho correctamente, 

Una última reseña la dedicaré a los colapsores.  La novela es del 1977, antes de la novela "Contact" de Carl Sagan. En esa novela Carl Sagan describe los agujeros de gusano atravesables. Para cuidar la parte hard  había pedido a un experto en relatividad general amigo suyo (creo que era Wheeler) que analizara el asunto. El resultado fué la teoría moderna de agujeros de gusano Lorentzianos, que es la que usan actualmente la mayoría de escritores de CF hard.  Pero en la época de escribir la guerra interminable no existía esa teoría, pero sí el concepto primero de agujero de gusano, el puente de Einstein-Rosen. La esencia de ese trabajo era que las partículas elementales en realidad eran soluciones de agujero negro de Schwarschild, pero en las que el interior de la zona dónde iría el agujero negro (por debajo del radio de Schwarschild) estaba reconectada con otra solución similar, haciendo un puente entre ambas partículas. Mediante esa técnica podía dar explicación a la carga eléctrica y otros aspectos de las partículas, pero sin partículas. Realmente la idea no funcionó, pero la idea de conectar dos puntos del espacio "por otro camino" había quedado. En esos trabajos anteriores al artículo de Wheller el agujero de gusano estaba dentro del horizonte de sucesos del agujero negro, y no eran atravesables. 

 Dada la situación física explicada antes Haldeman no disponía de una base firme para explicar que podía ser un colapsor, y da pocos detalles (no queda claro sí es algún tipo de agujero negro o alguna otra cosa). También comenta que los teóricos primero pensaban que al atravesar el colapso el tiempo entre la entrada y la salida es exactamente cero, y, mas adelante, tras unos experimentos, descubren que en realidad pasa un tiempo de fracciones insiginificantes de segundo. Aún así, ese cambio hace que los físicos de la novela deban reescribir todas las ecuaciones. Para tratar esos asuntos los físicos de Haldeman usan la reltatividad general, y no cosas cómo la supergravedad (que creo que ya estaba pergeñada por ésa época) o la teoría de cuerdas, que en su formato primitivo como teoría de hadrones alternativa a la QCD empezaba a asomar la cabeza. Por supuesto éso es absolutamente normal pues seguramente sólo un mínimo grupo  de físicos teóricos muy avanzados debían conocer esas cosas (y no estoy totalmente seguro de las fechas). En todo caso sí hubiera que reescribir la física de la novela hoy día todo seguiría exactamente igual excepto que los colapsores serían agujeros de gusano, y los físicos teóricos que las estudiaran serían físicos de cuerdas. O no, que en el último año los físicos de cuerdas, tras algo llamado correspondencia ER-EPR (ER proviene de Einstein-Rosen) son muy escépticos sobre la posible existencia de agujeros de gusano atravesables.

En definitiva, genial novela, mucho mas actual y fresca, que algunas novelas escritas esta década, repleta de ideas, precisión científica dentro de cualquier margen razonable en ciencia ficción y una delicia que en unas 150 páginas aporta mas que el total de algunas colecciones actuales que llevan el nombre de ciencia ficción, pero que quedarían mejor descritas como ciencia aflicción :P.